Consecuencias de la falta de control del pH en el agua de la piscina
31 de Marzo de 2018

Una de las tareas más importantes que llevamos a cabo las empresas de mantenimiento de piscinas en Madrid es el control del pH del agua por lo que queremos aprovechar este blog para explicar de modo sencillo en qué consiste y cuál es su importancia. Empecemos por decir que el pH es un indicador que nos informa sobre el grado de acidez del agua de la piscina. Para realizar esta medición se emplea una escala que está comprendida entre los valores de 0 al 14. Los valores entre 0 y 7 indican los grados más ácidos y mientras que los valores superiores, del 7 al 14 se refieren a los grados alcalinos.

Para el agua de una piscina se recomienda que estos valores se sitúen siempre entre 7,2 y 7,6, algo que se debe controlar, al menos, una vez por semana. Quienes trabajamos en las empresas de mantenimiento de piscinas en Madrid sabemos que el control de estos niveles no solo es importante para la destrucción de bacterias, sino también para garantizar la seguridad de los usuarios y contribuir al correcto estado de la instalación. Si el pH se encuentra por debajo de 7 existe la posibilidad de que la piel de los bañistas se reseque en exceso y que se deterioren también las escaleras, barandillas o mecanismos de funcionamiento de las bombas y filtros de depuración. En caso de que los valores se sitúan por encima de 7 será más fácil que se acumule cal en la superficie, que el agua se vuelva opaca y que haya más posibilidades de que aparecerán algas en el agua.

Confía en los técnicos de Piscinas Castilla - Construcción y Rehabilitación para el correcto mantenimiento de tu piscina. 

Artículos relacionados

Share by: